Pilar Pastor, psicóloga de FMLC
Una de las preocupaciones más frecuentes que suelen aparecer durante el proceso de duelo y que genera numerosas consultas surge cuando, pasado un periodo de tiempo considerable desde la muerte del ser querido, el doliente siente que se encuentra peor.
Parece que esa creencia de que “El tiempo lo cura todo” nos ha calado socialmente y esa sensación de encontrarse peor transcurrido un tiempo la contradice por completo, generando mucha inquietud y desconcierto, de manera que el doliente siente que está haciendo algo mal.
Sin embargo, tiene todo el sentido del mundo que, cuando ha pasado un tiempo desde el fallecimiento, el doliente se encuentre peor que al principio.
Asumir la realidad de la pérdida
Sea la muerte esperada o no, es frecuente que cuando por fin tiene lugar la pérdida del ser querido, el doliente lo viva con incredulidad, con la sensación de estar viviendo una realidad alejada de sí mismo, como si se tratara de una película o un mal sueño. Es como si una parte de nosotros entendiera y asumiera lo que ha sucedido, mientras que otra parte no lo entiende, se queda bloqueada, anclada al momento del fallecimiento.
Al recordar esos primeros momentos tras el fallecimiento, muchas personas recuerdan su estado describiendo la sensación como “estar en una nube”. Esa sensación no solo es característica de los primeros días del duelo, sino que puede extenderse también a los primeros meses. Seguir leyendo…